¡Haz el camino!
Camina porque eres creyente. Camina porque eres ateo. Camina porque eres agnóstico.
Ante todo, olvídate de tu motivo de fe o deportivo. Pero es primordial que no lo olvides.
Camina por tu motivo más íntimo, más personal. Camina sin ningún motivo.
Olvídate de tu motivo pero deja que te invada un motivo si no lo tienes, y siéntelo mientras caminas!
Camina sólo y encuéntrate! Camina con tus mejores amigos y piérdete. Y si te encuentras, piérdete de nuevo!
Camina desde Sarria y haz lo mínimo. Camina desde Sant Jean Pie de Port y hazlo completo.
Camina a tu ritmo y camina sin ritmo. Olvídate del ritmo a la vez que respetas tu ritmo!
Camina el camino, olvídate de todas tus versiones y el camino sacará tu mejor versión, sin medida!
«En el Camino, camina lento, no te apresures, que al único lugar a donde tienes que llegar es a ti mismo» Ortega y Gasset
Olvídate de todas las medidas y conoce sin medida a personas sin medida.
Llega a Santiago sin medida.
Llega a Santiago, tírate al suelo y ríe. Siéntete como un niño. Vuelve a ser niño!
Llega a Santiago, tírate al suelo y llora sin medida. Siente que estás vivo!
Siente el camino, conoce el camino, conócete a ti, el mejor camino del mundo, el camino más sabio.
«Camina por el Camino como si estuvieras besando la tierra con tus pies.»
Camina, busca tu punto y comparte tu experiencia con el mundo. Buen Camino!